Los planes de salud a corto plazo son una solución temporal de cobertura médica para individuos que se encuentran en un período de transición, como entre trabajos o esperando la inscripción abierta de planes de salud estándar. Ofrecen una cobertura limitada principalmente para emergencias y lesiones, ya que no cubren condiciones preexistentes ni los diez beneficios esenciales de salud exigidos por la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA). Por su naturaleza, tienen primas más bajas y altos deducibles, y su duración es limitada, no superando un año en muchos estados. No son un reemplazo a largo plazo para un seguro de salud completo y deben ser considerados con precaución, entendiendo claramente sus restricciones y limitaciones.